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quarta-feira, 29 de junho de 2016

Danza y Expresión Artística. --- Dança e expressão artística.

¿Cómo se puede representar el movimiento a partir de una figura inmóvil? ésta es una contradicción que ha obsesionado a muchos artistas durante milenios. "El movimiento en la inmovilidad, la inmovilidad en movimiento", este ha sido el lema de las diferentes expresiones artísticas de la danza, desde las antiguas tradiciones del sudeste de Asia hasta lo más contemporáneo como la coreografía vanguardista de Merce Cummingham.


Actualmente, se pueden visitar tres exposiciones donde podremos acercarnos al entendimiento sobre la expresión artista de los bailarines y bailarinas, así como la danza en sí misma. En el MET se exhibe "Pérgamo y los reinos griegos del mundo antiguo" - que muestra una gran variedad de danzarines - y en la que el movimiento está representado de una manera un tanto extraña por la estatua de un hombre identificado como Alejandro el Magno.


Pero, en realidad, Alejandro no está bailando, está cazando. En cualquier caso, la energía, postura y expresión - primordiales virtudes de la danza -, se concentran en esta figura. En el pasado la figura representada en esta estatua era reconocida como Meleandro o Actaeon, un cazador mitológico. Recientemente, sus rasgos faciales, aunque no muy fáciles de reconocer, han ayudado a que los eruditos le asignen la personalidad de Alejandro (la escultura data, probablemente, entre el año 250 al 100 antes de Cristo, es, por lo tanto, posterior a Alejandro en cualquier caso). Quienquiera que sea, el bautizo es convincente. En esta representación plástica, está atrapado en mitad de la acción; se puede sentir lo que estaba haciendo en ese mismo instante, para adivinar y lo que va a ocurrir a continuación.

Archivo EVE

Esta obra artística, es un ejemplo de algo que preocupa insistentemente a los artistas que representan la danza: Es un arte algo diferente a otras expresiones, desde todos los ángulos de percepción visual. La danza existe en tres dimensiones espaciales (así, como también, añadiendo la cuarta dimensión: el tiempo). Cuando los bailarines se mueven, cambian sus formas constantemente ante nuestros ojos; cuando estos movimientos son capturados en una sola imagen, la mirada del artista a menudo es atraída hasta el dibujo esbozado en su multiplicidad y complejidad.

24 Media

Si miramos a Alejandro desde la izquierda, observarás que su brazo izquierdo, descendiendo desde la altura del hombro, está apoyado. Desde el cuello hasta la mano, la tensión del cuerpo se muestra de una forma muy bella. Desde este punto de vista, se ve semi envuelto por su capa, alrededor de sus hombros y el brazo izquierdo, volando hacia atrás. Sin embargo, desde su lado derecho, esa capa es casi invisible - la figura es la de un desnudo - y ahora lo que domina la expresión del movimiento del cuerpo es el brazo derecho levantado.


Mirándolo desde la parte frontal, se hace evidente cómo los dos brazos están implicadas en la misma acción, acompañando con su movimiento la lanza que sujeta. Ahora podrás ver, incluso sin ver su rostro, cómo su cabeza se centra decididamente en un objeto situado más bajo que no se puede ver. Los ángulos de los codos responden unos a otros; los brazos y los hombros describen un zigzag descendente. Son movimientos de danza. Cada línea de aquí tiene un propósito. No hay nada del reposo que caracteriza el ideal griego. Este cazador es perfecto, y perfectamente capturado en el movimiento, pero su perfección está subordinada a la acción y a la intención de la misma.


Muchos de los que visitan la colección permanente de arte antiguo del MET, conocen la "bailarina del panadero" (llamada así porque fue donado por Walter C. Baker), y que proviene de Alejandría, Egipto. Esta exposición, nos ofrece la oportunidad de caminar alrededor de ella. Al igual que otros bailarines de su época (siglos III-II después de C.), está velado de pies a cabeza, y enmascarado. La escultura es una obra maestra en su representación del movimiento complejo a través de la tela.


Pocas representaciones de danza han sido así de multidimensionales, y tan ambigua acerca de la naturaleza de la danza en cuestión. El ángulo de inclinación del torso, la línea de la pierna que avanza (su pie está justo al lado de la planta), el pliegue del codo, todos las formas se suman para rodearla de movimiento. Muestra reposo y también acción, gracia y misterio; lo que muestra y lo que se esconde es belleza a partes iguales.

Ronnie Boehm

La primera imagen que se ve al entrar en el Museo de Arte Moderno de NY, es una exposición de Edgar Degas titulada: "Una extraña nueva belleza". En esta muestra se puede ver un cuadro que es la representación de una bailarina "en punto", al lado de su instructor. La obra se titula "Le Matre de Ballet" (realizada alrededor de 1876). A pesar de que el título no lo identifica, muchos espectadores de la obra de Degas, reconocerán el maestro Jules Perrot - el bailarín más grande de Europa en la década de 1830, con su coreografía dominante en las décadas de 1840 y 1850, siendo el profesor de ballet más importante en la década de 1870.


Degas parecía estar obsesionado con Perrot durante un tiempo muy prolongado. Este maestro de ballet, agarrando el bastón de altura, incluso cuando se sienta, encarna la absoluta autoridad: La mujer joven deberá interpretar lo que aparentemente es imposible, pero él sabe que puede hacerlo.


Aunque Degas es a menudo, y con razón, considerado un realista evocador, algunos expertos dicen que su arte representa el ballet con un toque de caricatura. Podemos poner un ejemplo - la única representación de un salto de ballet que se conoce de Degas - es en el cuadro titulado "Pas Battu" (realizado alrededor de 1879), que tiene un toque de deliberado absurdo. Los hombros de los bailarines parecen encorvados en el salto; el ángulo de sus piernas en el aire parecen un tanto ridículos; la gracia en el esfuerzo de los brazos ("en Couronne") parece cómico. Degas es preciso en su maldad; siente que está satirizando un salto de la danza que realmente no se representa así.


Los temas de Degas son a menudo el trabajo, el estrés y el agotamiento. En torno a esta exposición, sus bailarines, tan a menudo en reposo o comenzando su preparación, sustituyen a las muchas otras mujeres que representó trabajando: cantantes, lavanderas, prostitutas. Su tono artístico parece variar constantemente: Puede ser compasivo, desapasionado, tierno y, en ocasiones también, sin piedad.


Una de las más maravillosas imágenes representando la danza, es el "Friso de los bailarines" (traducción libre del francés "Danseuses attachant Leurs Sandales"), una pintura al óleo de alrededor de 1895 que se expone en el Museo de Arte de Cleveland. Cuatro bailarines sentados se están atando cada una de las cintas de su calzado ("sandalias"); siendo probablemente la misma bailarina reproducida desde cuatro ángulos diferentes. Las piernas separadas, las rodillas dobladas inclinándose sobre el torso, la cara oculta pero denotando el esfuerzo del trabajo, transformándose en una imagen de gracia, belleza y el encanto de todo aquello que rodea el baile.


Podríamos continuar en un viaje casi sin límites por el mundo del arte en su representación de la danza. Son muchos los artistas que nos han regalado imágenes que parten de su fascinación por el ritmo de la música, en su movimiento de la figura humana. Y no todo es baile, pero si movimiento acompasado, sensual y bello como es el ejemplo de Alejandro. Nosotros sentimos profundamente esa admiración de la estética en movimiento, y por eso queríamos compartirla hoy con vosotros.









Cultura e conhecimento são ingredientes essenciais para a sociedade.

A cultura é o único antídoto que existe contra a ausência de amor

Vamos compartilhar.







* Algunos archivos multimedia no se muestran en este correo electrónico pero se pueden ver en el sitio web.





--br via tradutor do google

Como pode representar o movimento a partir de um número ainda? Isto é uma contradição que tem assombrado muitos artistas por milênios. "O movimento na imobilidade, imobilidade no movimento," este tem sido o lema das diferentes expressões artísticas de dança, desde as antigas tradições do sudeste da Ásia para a coreografia mais contemporânea e nervoso Merce Cummingham.


Marieaunet

Atualmente, você pode visitar três exposições onde podemos abordar a compreensão da expressão do artista dos dançarinos e da própria dança. mostrando uma variedade de dançarinos - - e em que o movimento é representado de maneira um tanto estranha pela estátua de um homem identificado como Alexandre, o Grande, em MET "Pergamum e os reinos gregos do mundo antigo" é exibido.


Ian Claridge

Mas, na verdade, Alexander não é dança, é a caça. Em qualquer caso, a energia, pose e expressão - virtudes primárias dançar - estão concentrados nesta figura. No passado, a figura representada neste estátua foi reconhecido como Meleandro ou Actaeon, um caçador mitológica. Recentemente, o seu, embora não muito fácil de reconhecer características faciais têm ajudado os estudiosos atribuído à personalidade de Alexander (a escultura, provavelmente, remonta ao ano de 250 a 100 aC, é, portanto, depois de Alejandro de qualquer maneira). Quem quer que seja, o batismo é convincente. Esta representação visual, é pego no meio da acção; você pode sentir o que eu estava fazendo naquele momento, e adivinhar o que vai acontecer a seguir.


arquivo de EVE

Este trabalho artístico é um exemplo de algo que preocupa insistentemente artistas que representam a dança: É um pouco diferente de outras expressões, de todos os ângulos arte percepção visual. A dança existe em três dimensões espaciais (bem, bem, adicionando a quarta dimensão: o tempo). Quando os bailarinos se movem, eles mudam suas formas constantemente diante de nossos olhos; quando esses movimentos são capturados em uma única imagem, o olhar do artista é muitas vezes atraídos para o desenho esboçado em sua multiplicidade e complexidade.


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Se olharmos para Alexander a partir da esquerda, você vai notar que seu braço esquerdo, para baixo de altura do ombro, é suportado. Desde o pescoço até a mão, a tensão do corpo é mostrada de uma forma muito bonita. Deste ponto de vista, é semi colocou seu casaco em volta dos ombros e braço esquerdo, voando para trás. No entanto, uma vez que o seu lado direito, a camada é quase invisível - a figura é a de um nu - e agora domina a expressão do movimento do corpo é o braço direito levantado.


Daqui de cima do Norte

Você olha de frente, torna-se claro como os dois braços estão envolvidos na mesma ação, acompanhando o seu movimento segurando a lança. Agora você pode ver, mesmo sem ver seu rosto, como sua cabeça está focada em um objeto decididamente menor do que não pode ser visualizado. Os ângulos de cotovelos responder a uma outra; braços e ombros descrever um ziguezague para baixo. São movimentos de dança. Cada linha tem um propósito aqui. Não há nada do resto que caracteriza o ideal grego. Este caçador é perfeito, e perfeitamente capturado no movimento, mas sua perfeição é subordinada à acção ea intenção dele.


Ben Sadler

Muitos que visitar a colecção permanente de arte antiga do TEM, conhecer o "dançarino Baker" (assim chamado porque foi doado por Walter C. Baker), e vem de Alexandria, Egito. Esta exposição oferece-nos a oportunidade de caminhar ao redor. Como outros dançarinos do seu tempo (III-II depois de séculos BC), é velado da cabeça aos pés, e mascarado. A escultura é uma obra-prima em sua representação do movimento complexo através do tecido.


selvagem algo

Poucas apresentações de dança foram tão multidimensional, e assim ambígua sobre a natureza da dança em questão. O ângulo do tronco, linha de perna avança (o pé fica mesmo ao lado da planta), a dobra do cotovelo, todas as formas são adicionadas para cercar movimento. resto da amostra e ação, graça e mistério; o que mostra e esconde o que é beleza em partes iguais.


Ronnie Boehm

A primeira imagem que você vê quando você entra no Museum of Modern Art, Nova Iorque, é uma exposição de Edgar Degas intitulado "Uma estranha nova beleza". Neste exemplo você pode ver uma imagem que é a representação de um dançarino "no ponto" ao lado de seu instrutor. O trabalho é intitulado "Le Matre de Ballet" (feita em torno de 1876). Embora o título não identifica, muitos espectadores da obra de Degas, reconhecer o mestre Jules Perrot - o maior dançarino na Europa na década de 1830, com a sua coreografia dominante na década de 1840 e 1850, com o mais professora de ballet importante na década de 1870.


Behance

Degas parecia estar obcecado com Perrot por um tempo muito longo. Este mestre de balé, segurando sua bengala alta, mesmo quando você sente encarna a autoridade absoluta: Mulher nova que deve interpretar o que é aparentemente impossível, mas ele sabe que pode fazê-lo.


Cuded

Embora Degas é, muitas vezes, e com razão, considerado um sugestivo realista, alguns especialistas dizem que a sua arte representa o ballet com um toque de caricatura. Podemos dar um exemplo - a única representação de um salto ballet Degas é conhecido - está no quadro intitulado "Pas Battu" (feita por volta de 1879), que tem um toque de absurdo deliberada. Os ombros dos dançarinos parecem empenhados em salto; o ângulo de suas pernas no ar parecer um tanto ridículo; graça no esforço dos braços ( "Couronne") parece cômico. Degas é necessária a sua maldade; Ele sente que está satirizando uma dança hop realmente não está bem representada.


melhores prêmios

questões Degas são muitas vezes o trabalho, estresse e exaustão. Em torno desta exposição, seus dançarinos, tantas vezes em repouso ou iniciar a sua preparação, substituir as muitas outras mulheres que representavam trabalho: cantores, lavadeiras, prostitutas. Seu tom artístico parece variam constantemente: Pode ser compassivo, sem paixão, concurso e às vezes também sem piedade.


dança de energia

Uma das imagens mais maravilhosas que retratam a dança é a "Frieze of Dancers" (tradução livre do francês "Danseuses attachant Leurs Sandales"), uma pintura a óleo por volta de 1895 que está exposta no Museu de Arte de Cleveland. Quatro dançarinos sessão amarrar cada uma das fitas de seus sapatos ( "sandálias"); sendo provavelmente a mesma dançarino jogado a partir de quatro ângulos diferentes. Pernas afastadas, os joelhos dobrados, inclinando-se sobre o tronco, rosto escondido, mas que denota o esforço de trabalho, transformando-se em uma imagem da graça, beleza e encanto de tudo em torno da dança.


soco estúdio

Nós poderíamos ir em uma viagem quase sem limites pelo mundo da arte em sua representação da dança. Muitos artistas que nos deram imagens que saem do seu fascínio com o ritmo da música, o movimento da figura humana. E nem tudo está dançando, mas movendo-se ritmicamente, sensual e bonito como é o exemplo de Alexandre. Sentimos profundamente que a admiração da estética em movimento, e por isso, queria compartilhar com vocês hoje.


concevoir

Serralves pelo olhar da sua directora, Suzanne Cotter, - Portugal.

Nasceu na Austrália, passou por Paris, Londres, Nova Iorque e Dubai, até chegar ao Porto. Desde 2012 que Suzanne Cotter é a directora do Museu de Arte Contemporânea de Serralves. Chega de bicicleta. A conversa começa na sala onde está exposta a obra de Liam GillickAC/DC Joy Division House, uma sala cuja luz era praticamente desconhecida até à sua chegada. "Ver esta janela incrível, desenhada pelo Siza, foi muito simbólico para mim", explica Cotter, 54 anos. "Quando o convidei a vir cá ele ficou muito feliz por termos destapado a janela", recordou, na entrevista que deu à SÁBADO em Maio de 2016. "Finalmente, um director entende a minha arquitectura!", terá dito o Pritzker português. 


O que sentiu quando entrou em Serralves pela primeira vez? 

A arquitectura foi desafiante quando cá cheguei, não dava para perceber a sua dimensão. Não conseguia entender o sentido e a lógica. 

Foi fácil mudar isso? 

Mais ou menos. Comecei por tirar paredes [há paredes amovíveis em Serralves] e percebi que estava num espaço muito bonito. Houve uma boa redescoberta do edifício e queria que o público tivesse a mesma reacção, um olhar fresco. 

Esta peça de Liam Gillick faz sentido aqui? 

Funciona muito bem. Este é o meu quarto ano aqui, mas estamos ainda a começar a testar as possibilidades do museu. Há uma nova forma de pensar a exposição que não segue as convenções.

Aqui constrói um museu dentro de um museu... 

Temos um desafio muito interessante, porque somos um museu de arte contemporânea, uma forma de arte que está sempre em mudança. 

É possível termos um museu sem paredes? 

A Internet é uma espécie de museu sem janelas. Há muitas pessoas que já pensam o museu como um conceito em vez de uma estrutura física. Estou interessada em conjugar ambos. A dinâmica de como as pessoas vivem o museu mudou, é um espaço elástico, poroso e um sítio onde as pessoas têm liberdade de pensamento, de movimentos, de estar em público. 

Sai do escritório para ver as pessoas? 

Sim, sim, com muita frequência. Devem achar: "Quem é aquela senhora maluca que anda por aí?" 

Tem seguido a evolução das instituições portuguesas? 

Sigo e tento compreender o que vai acontecendo na paisagem. O panorama está a tornar-se mais complicado porque toda a gente antevê o que é preciso fazer. São tempos diferentes, andam todos a tentar encontrar o seu lugar e o seu papel.

Quais foram as grandes mudanças que sentiu desde que chegou? 

As pessoas estão mais interventivas. Fiquei surpreendida quando cheguei por não existirem grandes debates sobre a cultura. De repente as pessoas começaram a discutir sobre os Miró, a sua venda, o debate começou a surgir e isso foi muito saudável. Acho que vivemos num tempo interessante, de uma confiança tremenda mas também de frustrações tremendas. Quando cheguei estávamos no ponto mais baixo da crise económica, com a troika, a dívida, toda a gente estava tão deprimida. Mesmo que o sol brilhasse ninguém se mexia. 

Qual é a principal razão para essa mudança? 

Podemos pensar em termos existenciais. Quando falo com as pessoas elas dizem que as coisas são como são e temos de andar para a frente. 

Sente isso nas instituições? 

Há uma frustração grande, acho que as pessoas sentem que há muito mais para fazer. As instituições, em todo o lado, estão a pensar quais serão as pessoas que vão fazer o trabalho no futuro. Como é que damos a oportunidade e criamos os futuros curadores, conservadores, escritores, editores de catálogos, futuros gestores de equipas, futuros técnicos… Encontro grande inspiração nas gerações mais novas, elas abrem os seus próprios espaços, decidem fazer projectos, publicam zines. Pensam: "Ninguém quer saber de nós por isso vamos fazer o que nos apetecer." E acabam por fazer grandes coisas. 

Falou de Miró, os seus quadros serão expostos aqui… 

Estávamos todos com esperança que isso fosse acontecer.

Qual é que foi o seu papel? 

O meu papel foi dizer que sim, que os mostramos [ri]. A iniciativa partiu do ministro da Cultura [João Soares, na altura]. 

Como viu toda a polémica? 

Eles deviam mostrar os quadros ao público, fazer uma exposição e talvez essa exposição devesse circular pelo País. Mas não estava a pensar em nós porque somos um museu de arte contemporânea e Miró era um artista modernista. Para Serralves é importante que sejamos parte da conversa. Não a liderámos mas contribuímos.

Será na Casa ou no Museu? 

Será onde fizer mais sentido para as obras. Perguntei ao Álvaro Siza, caso fizéssemos a exposição, se ele a poderia desenhar. Quero dar uma apresentação contemporânea. 

Álvaro Siza Vieira está envolvido? 

Ele concordou fazer o design da exposição, o que será fantástico! É uma exposição que precisa de ser mostrada. O público quer ver estas obras e nós mostramo-las da melhor maneira possível. 

O Estado português deve ficar com as obras ou não?

Acho que deve ficar. Não seria uma colecção para aqui mas funciona muito bem para outras colecções nacionais. É uma oportunidade fantástica e iria estimular a maneira como as pessoas iriam pensar a colecção, o diálogo (ou não diálogo) entre Portugal e Espanha. Há uma série de coisas que podem ser geradas a partir daí. Às vezes apenas uma obra pode fazer a diferença para a direcção de um museu. 


Percorremos outras salas, sempre cheias de alunos do secundário. Suzanne explica que estava na comissão do Guggenheim de Nova Iorque antes de vir para Portugal. 

Foi fácil adaptar-se a Serralves? 

Sim, porque conhecia a linguagem do museu. Não, porque vinha de uma situação cultural distinta. E por causa da língua, claro. No princípio não falava nada de português, mas as pessoas são fantásticas e bilingues. São mesmo simpáticas - não nos apercebemos até voltarmos a Nova Iorque, onde estão todos maldispostos. 

Aprendi a ler a gramática portuguesa mas também a forma como devemos comunicar sem ser verbalmente. Ainda estou a aprender. 



Quais foram as motivações para se candidatar a Serralves? 

A oportunidade de dirigir um museu de importância nacional e com reconhecimento público. 

Onde estava quando soube do convite? 

No Dubai, a caminho de Teerão, e pela primeira vez senti-me assustada e comecei a pensar nos prós e contras com o meu marido. Nova Iorque, Porto, Nova Iorque, Porto. Disse-lhe: "Vou fazer isto." 

Com quem é que falou primeiro?

O primeiro contacto foi com a administração. Usei um fato azul-vivo. 

Já conhecia a arte portuguesa? Conhecia o trabalho do Pedro Cabrita Reis e do Julião Sarmento. Um pouco da Joana Vasconcelos, do Jorge Molder, todos os que já tinha visto em Veneza. Senti-me muito novata e lembro-me de ter sentido algum pânico. Agora tenho pontos de referência e preencho os espaços em branco. 

Suzanne pára e destaca uma obra que foi executada em Serralves, in situ, por jovens estudantes de Belas-Artes.

Como é que foi cativada pela arte?

Sempre gostei de arte – sempre, sempre, sempre. Escrevi uma peça de teatro quando tinha 8 anos. A professora disse que era tão boa que acabámos por interpretá-la. Depois estudei ciências na escola porque temos de fazer coisas sérias [ri]. Na minha primeira viagem a França, a Paris, fui ao Louvre e senti-me tão emocionada que perguntei a alguém: "O que é que se tem de fazer para se ser responsável por isto?" Tinha 21 ou 22 anos. Eles responderam: "Vous allez à l'école du Louvre" [diz numa voz rouca]. Voltei para a Austrália para estudar História da Arte.

Decide sempre com o coração? 

Sou muito intuitiva. A grande arte faz-me saltar, dá-me energia, faz-me o sangue subir à cabeça e sinto que posso ser uma pessoa melhor. 

Qual foi a última vez que sentiu isso fora do trabalho?

Boa pergunta. [Demora-se]. Sinto-o com alguns filmes. Vi um que me fez sentir muito inspirada. Passa-se no Inverno na Anatólia. Há um homem que é escritor… 

Sono de Inverno? 

Sim, achei-o muito profundo. Acabei de ler um livro maravilhoso da Donna Tartt, O Pintassilgo, e quando o terminei pensei: "Tenho de ser melhor no meu trabalho." Não é pela história mas pela maneira como as pessoas conseguem usar um meio (pode ser um filme, dança, pintura, fotografia) para expressar a profundidade das coisas. Quando somos jovens sentimos muito isso na música, eu adorava música rock e punk porque achava que estava a falar para mim. 

Suzanne Cotter esteve presente na inauguração da exposição "Universalistas – 50 Anos de Arquitectura Portuguesa", em Paris. Irá ver a exposição sobre Amadeo de Souza-Cardoso mais tarde. 

Já conhecia Amadeo? 

Sim, já fui ao seu museu em Amarante e vi algum do seu trabalho na Gulbenkian. É muito interessante. 

Ainda é muito desconhecido, mesmo para os portugueses.

É? Será porque morreu tão novo? Talvez esta exposição mude isso. 

Não era de Lisboa, também... 

Aí está o problema. Sente isso aqui em Serralves? 

Um bocado, mas é compreensível. No passado, passei por grandes centros metropolitanos e as pessoas sentem que tudo só acontece ali. Os museus deviam poder estar em qualquer lado. Talvez esta exposição no Grand Palais dê uma segunda vida ao Museu de Amarante. 

Entramos na sala que tem a exposição de Wolfgang Tillmans. Já conhecia o artista? 

Circulávamos pelos mesmos meios em Londres, quando ambos vivíamos lá, e sempre o achei encantador. Quis que ele trabalhasse em condições que o deixassem feliz. Um artista feliz é um bom artista. Não é no sentido de se ser complacente, mas sim garantir as condições necessárias para que possa trabalhar. O Wolf é um artista incrivelmente generoso, mas tem o seu quê de estrela rock. Disse-lhe que não precisávamos de ter uma exposição aqui só porque eu ou outra pessoa queríamos, tinha de ser uma exposição com significado. Por isso foi um win-win: para nós enquanto público e para ele, como artista, porque sentiu que tinha produzido uma exposição especial. 

Acha que se não tivesse tido a experiência de Londres seria mais difícil trazer estes artistas? 

Não diria isso. Serralves tem uma óptima reputação. Não sou uma perita ou alguém que sabe tudo sobre arte portuguesa dos anos 60, mas posso trazer outras coisas, que podem relacionar-se numa perspectiva diferente daquela que já existe. Falando genericamente, depende da visão da pessoa que está a guiar o carro. 

Gosta de outsiders? 

O meu papel aqui é não ter medo de mostrar arte que possa parecer difícil. Noutros tempos, Robert Rauschenberg foi difícil, Picasso foi incrivelmente difícil (ainda é para muita gente). O Wolfgang tem um trabalho que é difícil mas que também é incrivelmente sensível. Alguém pode olhar para esta obra e dizer apenas: "Que linda, adoro o oceano." Isso ia ser simpático. 

É importante encontrar o equilíbrio entre conhecedores e o público em geral? 

É importante e digo-o desde que cheguei, não estamos aqui por nós. Serralves foi construído para o público. Também foi construído para os artistas, que para continuarem a crescer precisam que o público reconheça o seu valor. 

Nestes três anos, algum artista lhe pediu para vir cá expor? 

Muitas vezes, mas é normal. 

Saímos para o jardim sem noção do tempo e ficamos a saber que Suzanne adora polvo à lagareiro e passear à beira-mar. 


Gosta do Porto? 

É uma cidade muito verdadeira, não é superchique, é muito real e as pessoas são muito humanas. 

Como é o seu dia normal? 

Tomo o pequeno-almoço com o meu marido e depois vejo osemails. Há dias em que tenho várias reuniões com a minha equipa. Os dias são longos, num dia típico saio da fundação pelas 19h30 ou 20h, vou para casa, relaxo, janto e trabalho mais um bocado. 

Nunca descansa? 

Não, trabalho com pessoas que estão em diferentes fusos horários. 

Costuma ir a Lisboa? 

Sim, é um pouco frustrante porque nem sempre posso ir às inaugurações. Tento ir, idealmente, uma vez por mês, mas acabo por ir a cada seis semanas para ver as exposições que estão a decorrer, falar com pessoas, visitar ateliês. 

Que artistas achou mais surpreendentes em Portugal? 

Uma artista que acho absolutamente incrível é a Lourdes Castro. É tão extraordinária e bonita. Foi surpreendente a quantidade de jovens artistas interessantes que encontrei e adoro o [projecto] Uma Certa Falta de Coerência. 

Antes da sessão fotográfica exterior, perguntamos se o parque vai ganhar mais protagonismo. Suzanne responde que uma exposição de Haegue Yang será inaugurada ali em Junho - será a 22. Brincamos sobre a possibilidade de o jardim receber outro tipo de eventos. 

Tiveram um casamento mediático [de Jorge Mendes] no ano passado... 

Não foi o meu [ri]. 

Como se pode casar em Serralves?

Estamos concentrados em reduzir o número de eventos e torná-los mais exclusivos, não no sentido de excluir pessoas, mas de torná-los mais rentáveis. Este é um monumento nacional, um sítio extraordinário, por isso tem de ser uma coisa especial. É um automatismo que nos permite desenvolver um programa, ter alcance na educação e em tudo o resto. Precisamos e esta é a realidade.





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Cerimónia de entrega do F-84G ao Museu do Ar, Portugal.

No dia 23 de Junho de 2016 decorreu, no Aeródromo de Manobra N.º 1 (AM1) em Maceda/Ovar, a cerimónia de entrega do F-84G Thunderjet - número de cauda 5131 - ao Museu do Ar.



Ao longo de cerca de três anos e meio diversos militares do AM1 reconstruíram um F-84G Thunderjet, que foi agora entregue ao Museu do Ar para ocupar o lugar que lhe pertence na galeria dos aviões a reação.

Evento decorreu no AM1, em Maceda/Ovar 


Esta aeronave teve um longo e valioso contributo para a aeronáutica militar, entre 1953 a 1973. Contribuiu largamente para a capacidade operacional da Força Aérea e para a prontidão para o combate de inúmeros pilotos.

Na cerimónia – presidida pelo Chefe do Estado-Maior da Força Aérea, General Manuel Teixeira Rolo - estiveram presentes vários dos elementos ligados ao F-84G no passado, que serviram o país e a Força Aérea ao operar com esta aeronave. O evento integrou-se no programa relacionado com a comemoração do Centenário da Aviação Militar portuguesa e do 64º aniversário da Força Aérea, na lógica de valorização e reforço de referências passadas e na procura de uma aproximação salutar entre gerações: a presente e as que serviram anteriormente na aviação militar, salvaguardando assim o dever de memória.

Em 2005, a inauguração do pólo do Museu do Ar em Ovar veio trazer à região um espólio composto por onze aeronaves em exposição, veículos de apoio diverso e um vasto conjunto de outros equipamentos/materiais relacionados com as mais diversas áreas de operação da força aérea. Releva-se ainda o desenvolvimento de várias atividades com a participação da comunidade envolvente, promovendo uma relação de proximidade da força aérea com a sociedade civil. Neste domínio salientam-se, para além dos mais de cem mil visitantes desde 2007 (17.400 em 2015), o restauro e conservação de várias aeronaves (Piper, T-A7P, Alouette III colocado no Museu da Guerra Colonial em Famalicão e o A-TP em exposição na porta d’armas do AM1).

A expressão mais recente do trabalho de restauro do F-84G constitui-se como uma componente cultural e de cidadania essencial para, através do conhecimento do passado, compreender o presente e planear o futuro.






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