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quarta-feira, 12 de novembro de 2014

La Tienda del Museo: 4 Bases · en INSTITUCIONES, MUSEOGRAFÍA, MUSEOLOGÍA, OPINIÓN. ·


“Los países se mueven más
lentamente que los mercados”.
Toba Beta

 
Yoko Ono Shopping Bag

La visión del museo como una plataforma comercial nunca fue bien aceptada del todo por los puristas, siempre hubo rechazo al respecto, pero… La “pureza de la cultura” se enfrentaba directamente con la invasión comercial, con la “mercantilización de la cultura”, amenazando con corromper sus valores tradicionales. Los museos eran muy reticentes a la entrada de “mercaderes del templo”, porque ponían en peligro la concepción virginal del museo como “Templo de las Musas”. La estética también preocupaba entonces porque no se soportaba la idea de tener un bazar bajo el techo del museo. La cosa comenzó a cambiar cuando los puristas, sobre todo los que trabajaban en los museos, engrosaban las listas del paro porque faltaban recursos para la financiación. Fue entonces cuando estos puristas programaron que el visitante se viera obligado a salir del museo a través de una tienda.

 
Archivo EVE

El concepto de museo ha ido evolucionando muchísimo en estos últimos años. Ha pasado de ser “templo sagrado” a espacio para el disfrute, aprendizaje y la experimentación para todos los públicos. La caída progresiva de las ayudas para complementar la financiación del museo y el desastre económico obliga a estas entidades a autofinanciarse. Las tiendas del museo han pasado pues de ser un mostrador dónde se vendían postales y carteles a desarrollar una función fundamental para la generación de ingresos propios. Las tiendas de museo con éxito ayudan a mejorar la financiación del museo de manera significativa, pero también son un vehículo de comunicación del museo con el exterior. El posicionamiento de su Identidad y la comunicación de su misión, constituyen la prolongación de la experiencia del visitante en el museo.
 
Archivo EVE

Una tienda de un museo es un híbrido entre lo que es una tienda convencional de regalos y una exposición. Es una parte integrante del museo que ayuda a conseguir objetivos económicos. La decisión de ofrecer un servicio de tienda ha de responder a una decisión estratégica por parte del museo. Una tienda bien gestionada puede convertirse entonces en un pilar indiscutible del propio museo en términos de financiación, imagen y comunicación de Identidad y misión. Para nosotros, las bases de esta concepción comercial y estratégica, son:

1. La tienda, como el resto de servicios que ofrece el museo, debe velar por el cumplimiento de la misión y objetivos de este.

2. Si se considera el museo como un producto, la tienda si sitúa al nivel del producto aumentando aquello que el visitante no espera o supera sus expectativas y que, por tanto, distingue a un museo de otros.

3. La tienda debe contribuir a que el visitante prolongue el recuerdo de su experiencia placentera en el museo, reforzando la imagen de marca de la institución, su Identidad.

4. La tienda debe contribuir no solo a mejorar los ingresos sino a incrementar la satisfacción del visitante y a que el recuerdo del museo permanezca en el exterior el mayor tiempo posible.

 
Aldo Lanzini “Le maschere”

Comprar constituye una actividad que resulta cotidiana a la mayoría de nosotros, aunque con la que está cayendo es una actividad que, desde el punto de vista de ocio, está desapareciendo progresivamente para dejar paso a la adquisición, exclusivamente, de productos de primera necesidad. La tienda del museo, en cualquier caso, debe hacer de puente entre el visitante y el museo apelando a lo cotidiano, a una respuesta amable sobre una demanda lícita del consumidor. Nosotros el único peligro que vemos en esta actividad dentro de los museos, es que las tiendas se acaben convirtiendo en supermercados. Ya existen museos de arte que venden productos de alimentación. Tampoco hay que pasarse.

fonte: @edisonmariotti #edisonmariotti http://evemuseografia.com/2014/11/12/la-tienda-del-museo-4-bases/

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