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segunda-feira, 15 de setembro de 2014

El Museo Que Esconde Otro - en CULTURA, MUSEOGRAFÍA, MUSEOLOGÍA, OPINIÓN. ·

“Todo lo que se puede imaginar es real”. Pablo Ruiz Picasso





Poster: Illusion Havas

Creemos firmemente en lo importante que es la imaginación como ingrediente que estimula nuestra curiosidad por las cosas que nos rodean y que nos empuja a buscar respuestas. A su vez, defendemos la idea de que el museo regional-local, como institución, no debe perder su esencia, que no se convierta en un ente irreconocible, quizás seamos unos románticos. En todo caso, en este nuestro mundo de los museos, se están planteando necesidades inmediatas que están por encima de ensoñaciones. Pensamos que la sociedad necesita urgentemente conocimiento y que es importante que nosotros, los implicados en este mundo, asumamos nuestra obligación de ser generadores de esa curiosidad, de fomentar las ganas de saber más sobre más cosas, de seguir trabajando sobre la idea de que cultura es paz.



Archivo EVE

Los museos son entidades que deben asumir el papel de generadores de cultura para todos los públicos. Detrás de cada museo debe haber una máquina bien engrasada que fabrique curiosidad, que potencia la sensibilidad, que genere cuestiones, que duplique nuestra capacidad crítica. Corremos el riesgo de resultar repetitivos, pero la urgencia es tal que nos da lo mismo. Los museos, sobre todo los regionales-locales, son potenciales activos del conocimiento, de la didáctica en el plano social, sobre todo para los adultos. Los museos locales no pueden sustraerse de ese rol tan importante, asumiendo ese activo como responsabilidad suya. No deben ser entidades inmóviles, en realidad son servicios sociales. Todo esfuerzo es poco para que la gente se acerque, que acceda a los museos en busca de saber más en su tiempo de ocio. Los museos regionales-locales son instituciones que deben entender su cometido activo como generadores de pensamiento constructivo, como agitador de imaginaciones. Nos da igual si el museo es de arte, arqueológico, antropológico, de ciencia y tecnología, de folklore… Los responsables de los museos deben ser conscientes de que si no generan estímulos no cumplirán con su labor esencial, que es la de proporcionar conocimiento sea cual sea su especialidad. El modelo de gestión monolítica no ayuda, hay que asumir riesgos para avanzar.



Archivo EVE

En todo caso, nuestra opinión es que cualquier planteamiento debe estar enfocado al estímulo de la imaginación colectiva, esa debería ser su función social. Y el estímulo para el uso de la imaginación aparece a partir del uso de la imaginación. No existen edades concretas como objetivo de ese estímulo, es para todos los públicos. Detrás de cada museo-institución debe haber espacio para el fomento de la imaginación, no tanto para la organización de su contenido a partir de la norma. La norma como norma no es estimulante, y el caos no es necesariamente el resultado de la falta de norma. El vacío es el verdadero caos. La imaginación además ayuda a encontrar recursos donde aparentemente no hay nada, porque es el pilar fundamental de la creatividad. Y la creatividad no es un don, es resultado del ejercicio de la imaginación. Necesitamos que detrás de los museos exista el objetivo de provocar curiosidad, de mostrar que el uso de la imaginación, que la construcción creativa, es un medio de actuación fundamental contra los complicados tiempos que nos toca vivir, sobre todo a los más jóvenes.


fonte: @edisonmariotti #edisonmariotti   · 

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